El Servicio Sismológico Nacional (SSN) informó que este viernes se han registrado en la delegación Benito Juárez tres sismos de magnitudes 2.2, 1.8 y 1.5 grados, y aclaró que la Cuenca de México tiene una geología y tectónica compleja por lo cual no es de extrañarse que ocurran esos fenómenos en la zona.
En un reporte especial, expuso que el primer sismo ocurrió a las 11:07 horas, el segundo a las 11:20 y el tercero a las 11:39. Indicó que, si bien la magnitud de los sismos fue baja, fueron sentidos levemente en algunas zonas de la Ciudad de México cercanas al lugar del epicentro.
Recordó que por la mayor cercanía con el epicentro las ondas sísmicas se atenúan menos y el sismo se siente más fuerte, como fue el caso de estos eventos.
El organismo del Instituto de Geofísica de la UNAM explicó que la Cuenca de México, donde se encuentra la Ciudad de México, está ubicada sobre uno de los más importantes rasgos fisiográficos del país.
Por lo regular la actividad sísmica de la cuenca de México y su vecindad es poco numerosa y de baja magnitud. Sin embargo, sí se llegan a registrar varios sismos al año, detalló.
Detalles de los sismos
Con base en los eventos registrados se tienen indicios de que la mayor parte de la actividad sísmica local se concentra en los márgenes de la Cuenca de México, pero se han llegado a registrar eventos importantes en las cercanías de la misma, como el ocurrido en Acambay, Estado de México, en 1912, de magnitud siete.
En cuanto al origen de los sismos en la región, agregó que se piensa que son generados por el reactivamiento de antiguas fallas y también se considera que pueden ocurrir como resultado de la acumulación de tensión regional o que el hundimiento del Valle de México podría originar tensiones que, si bien no generan propiamente a los fenómenos, sí pudieran dispararlos.
El SSN apuntó que también existe la hipótesis de que los grandes sismos generados en la costa pudieran dar lugar a condiciones de desequilibrio y desencadenar sismos locales.